Conociendo el nuevo escuadrón chunnin.

Solo hacía una semana que había sido condecorado como chunnin, aún no podía creer mis avances, pero a su vez tampoco cuestionaba estos viniendo de mi. Estaba  tumbado en mi cama, hoy era dia libre, corría una fresca brisa por la ventana que aliviaba el calor de verano mientras leía libros. En ese momento sonó la puerta, parecía que alguien estaba llamando a esta, no tenía muchas ganas de ver a nadie, pero suspiré soltando el libro mientras iba poniendo los pies en el suelo para levantarme.

-Ya voy!

Al llegar a la puerta sujeto el pomo de esta y la abro dejando revelar la identidad de aquella persona que se hallaba tras ella. Era un jounnin, concreta mente una de las manos del Hokage, este traía un sobre para mi, este contenía una carta, al recibirlo nos despedimos y cierro la puerta, es entonces cuando me dirijo hacia la mesa y arrastrando una silla hacia atrás para dejar espacio y sentarme. Una vez allí saco el contenido del sobre de remitente: ''Kagusho'' y leo este, al parecer nos estaban citando a todos aquellos que nos graduamos semana atrás en su despacho, el señor quería conocer al nuevo escuadrón chunnin esa misma tarde, por lo que decido preparar mi uniforme que estaba tendido.

Ya había pasado la mañana, pero no podría permanecer haciendo el vago durante mas tiempo en mi casa, el Hokage nos esperaba, esperaba nuestra visita. Así que decido vestirme y salir camino al edificio principal, no tenía prisas por lo que iría caminando tranquilamente y disfrutando del gran ambiente de nuestra aldea, las calles estaban repletas de gente, negocios, etc. Un ambiente familiar se podía palpar... familiar curiosa descripción para una calle. Ya había llegado a las puertas del edificio, por lo que decido subir al ultimo piso y dirigirme a la oficina del Hokage, una vez allí alzo mi puño y lo dejo caer suavemente tres veces seguidas sobre la puerta, a continuación abro esta.


-Con permiso

Allí se encontraba el famoso Hokage y todo poderoso, pero no tenía una imagen imponente ni mucho menos. Permanecí de pie al lado de la puerta a la espera de los demás miembros del escuadrón y pasando ciertamente un momento incómodo.

Despertaba temprano para hacer algo de ejercicio no me gustaba dormir hasta tarde aun cuando no tuviéramos mucho trabajo por hacer puesto a que en la aldea se respiraba una completa calma y una gran paz pero eso era solamente aquí no sabíamos a ciencia cierta que ocurría fuera de la misma. Sabía que tenía que presentarme en la oficina del Hokage pero aun tenía tiempo para regresar a mi habitación y poder cambiarme y aun así ir con tiempo para aquella reunión. Desconocía para que nos había citado o tal vez era momento de preparar a mas shinobis para así tener un ejército preparado o era simplemente una felicitación puesto a que recientemente había ascendido de rango junto con otros más que a decir vedad no conocía del todo bien.

Fui con calma hacia el edificio principal llevando mi banda atada en la pierna derecha la cuales los guardias la vieron permitiéndome la entrada. Note la presencia de dos chunin mas sin duda no era una felicitación puesto para que se tomaría la molestia de llamarnos a todos a su presencia si bien lo pudo haber hecho de la misma forma en que nos citó, mediante una carta – Veo que no soy el único a quien llamo – Decía de lo más tranquilo tal vez tanto que había omitido el saludo a los presentes, las puertas aun permanecian cerradas no sabia cuanto nos haria esperar o si habia mas de nosotros que faltaran por llegar pero no habia nada mas que hacer que esperar.

Hoy parecía ser un día especial. Ayer había recibido una carta donde me invitaban a reunirme con el mismisimo Hokage, el hombre que había logrado traer la paz a los clanes del país del Fuego.
Hacía muy poco tiempo que me había convertido en Chunnin, y sentía que avanzaba a grandes pasos.
Me levanté un poco antes de lo habitual, y procedí a ducharme y vestirme con mi uniforme, mientras me preguntaba la razón del Hokage para citarme.
_Quizá sólo es para felicitarnos...pero es el Hokage, seguramente tiene una razón mas importante...
La paz invadía el país por primera vez en mucho tiempo, así que me desagradaba la idea de que un nuevo peligro nos acechara.
Como sea, debía alistarme y llegar temprano.
Me preparé un sencillo desayuno, me arreglé el cabello y salí de mi casa saltando entre los edificios de la aldea. Al cabo de un par de minutos había llegado. Una vez en el último piso, observé a otros tres jóvenes, quienes al parecer esperaban lo mismo que yo. Los saludé con una mano.
_Hey! ¿Ustedes también fueron citados aquí por el Hokage?

Ya había pasado bastante tiempo desde que llegó el primer joven, dado que no creía que acudieran muchos mas, vi conveniente el hecho de tener que hablar. Me levanto de mi asiento y los observo detenidamente, primero al que llego, esos ojos... no inspiraban mucha confianza. Después pude observar un joven un tanto extraño, al parecer era el mas joven de la sala y portaba el símbolo del clan Uchiha. Seguidamente estaba aquel chico del cabello azul, era un tanto extrovertido o al menos lo parecía. Pero cuando pude girar mi vista al ultimo miembro vi aquella Kunoichi y me sorprendió, normalmente las mujeres nunca optaban por el camino ninja.

Tras observarlos detenidamente me cruzo de brazos y les digo:

- Supongo qué os preguntareis el por qué os e convocado, según tengo entendido vosotros 4 sois junto con algún otro irresponsable que no a venido ante mi, los mejores chunnin de la Historia de konoha. Habéis superado las estadísticas cosa que dudo mucho que vuelva a pasar. Os e traído ante mi para felicitaros, pero no solo estáis aquí por eso.

Entonces me giro asomándome a la ventana mientras me dirigía aquellos chicos de espaldas.

Cómo bien sabréis a llegado el rumor de que al igual que nosotros, otros países han decidido unirse formando aldeas, no se bien cuales son sus intenciones por esto mandé un escuadrón anbu a espiar, las noticias llegadas son claras. Las aldeas están reuniendo ejercitos y contratando mercenarios, e supuesto que al igual que nosotros temen ser atacados, pero cabe la posibilidad de que estén iniciando alguna ofensiva. Quizás la idea sea reprimir el crecimiento de otras aldeas o simplemente robar.

En ese momento me vuelvo a dar la vuelta y los miro fijamente, me acerco a mi escritorio y saco 2 sobres los cuales dejo sobre la mesa y apoyo mis manos sobre esta mientras les digo.

-He decidido mandaros a explorar a tierras lejanas, nadie debe saber que sois shinobis por lo que he decidido colar campesinos que deben viajar entre vosotros, de esta manera hará que os adapteis.

Bien e leído vuestras fichas así que e decidido mandaros en grupos de 2 teniendo en cuenta vuestras habilidades, Uchiha Obito y Shisui ustedes dos se encargarán de acompañar a Tsubasa un campesino que tiene que viajar, vuestro destino es el Pueblo Eiji que se encuentra en el país del Agua. Una vez lleguéis deberéis buscar al tabernero e interrogarlo, recordad que no os pueden ver como ninjas.


Rey Kohina y Nyx Chiba, según e evaluado vuestras habilidades combinan de maravilla, vosotros tendréis que llevar a Kumi a la capital del viento, una vez allí debéis conseguir información quiero saber cuan grande es el ejercito que poseen.

Cierro los ojos y suspiro, esto es todo dejando dos sobres en frente para que los tomaran.

Sobre para Shisui y Uchiha Obito escribió:Rango: C
Tema: El interrogatorio
Encargado: Uchiha Obito y Shisui
Cantidad de post: 3 por persona

Descripción: Llevar a tsubasa a Eiji e interrogar al tabernero para descubrir la posición del bijuu de 3 colas.

Sobre para Rei y Nyx escribió:Rango: C
Tema: Espionaje
Encargado: Nyx Chiba y Rei kohana
Cantidad de post: 3 por persona

Descripción: Averiguar cuan grande es el ejercito de la posible aldea oculta.

Escuchaba atento a las palabras de Lord Hokage sin prestar mucha atención a mis compañeros sin duda no eramos los únicos cuatro chunin que estábamos en la aldea pero si los únicos que habíamos hecho acto de presencia ante la invitación eso sin duda hablaba mal de ellos. Así que de eso se trataba una nueva guerra o una posibilidad de que eso fuera, puesto a que no se manda al escuadrón AMBU por niñerías y el que comenzaran a robar a las demás aldeas o que comenzaran a formar un ejercito sin duda no era algo que se podría dejar pasar por alto. "No creo que intenten atacarnos si no están preparado para ello" Pensaba en aquello aunque no sabia, tal vez no sabíamos que tan grande era el ejercito que ya tenían.

Escuchaba como nos dividía y la misión que se nos asignaba, me había tocado con Rei la única kunoichi que estaba aquí presente era algo sorprendente que una mujer estuviera entre nosotros pero si lo logro es porque sin duda es digna para formar parte de este equipo de chunin. Si bien hubiera preferido estar con cualquiera de los otros al escuchar de lo que constaba nuestra misión el que estuviera conmigo podría ayudar puesto a que estoy enterado que a las mujeres no solo las entrenan en combate y uso de técnicas si no también a infiltrarse usando otro tipo de habilidades y sin duda eso nos vendría bien.

-Vaya alguien tiene prisa - Decía al escuchar al mayor mientras tomaba aquel sobre que me indicaba cual era la misión que tenia que cumplir, algo me dejaba con duda puesto a que no conocía las habilidades de mi ahora compañera pero por algo Lord Hokage nos había colocado juntos y al escuchar su exprecion fue por que nuestras habilidades combinaban, como puedo combinar mis habilidades de veneno con las de ella -En cuanto de la orden partimos Lord Hokage-

Fui la última en llegar antes de que el Hokage comenzara a hablar. Tal como creí, no habíamos sido citados sólo para felicitarnos. Habló de otras aldeas, las cuales al parecer estaban creando ejércitos, con un motivo que desconocíamos.
El Hokage nos encomendó una misión, al parecer la más importante que yo había tenido. No pude evitar el sentime halagada y sonreí ligeramente. Mi compañero era un chico, algo menor que yo y con cabello azul. Parecía extrovertido, pero al mismo tiempo misterioso.
Cuando el Hokage puso los sobres a nuestro alcance, no dudé y lo tomé con determinación. La misión consistía en un espionaje.
_Espero hacer esto lo mejor posible...
Miré a mi compañero y le mostré una ligera sonrisa.
_Hay que esforzarnos.