Atrapando al grafitero

Me había presentado temprano en la oficina del Kage, quería recibir mi primera misión ya como un genin de la aldea. No estaba seguro de que sería pero ninguna misión era menos puesto que todas ayudaban a la economía no solo de la aldea sino principalmente a la mía puesto que necesitaba el dinero para diversas cosas que podría utilizar en mis marionetas – Buenos días, mi nombre es Fausto y vengo para saber si hay alguna misión disponible para mí – No era de los que tenía muy buena educación pero al tratarse de alguien con mayor rango que el mío era indispensable aquella educación. Esperaba un poco y al momento me entregaban un pergamino donde se detallaba mi misión, se trataba de atrapar a un joven que realizaba grafiti en el dojo de la aldea y que por algún motivo no se le había logrado detener antes. Me dirigí rápido al dojo, siempre tenía una de mis marionetas para el apoyo del mismo tal vez podría ser así mas fácil el detener al joven, me acomode en un edificio frente al dojo intentando aparentar normalidad y que simplemente estaba en ese lugar para estar solo.

Llegue pronto al dojo esperando a que el joven volviera a aparecer, no se sabía nada salvo que tenia doce años y que tenía una velocidad inusual, no se le podía ver el rostro puesto que siempre iba cubierto por ese motivo no daban con el después de la persecución. Esperaba que en esta ocasión pudiera detenerlo o al menos poder ver su rostro para poder detenerlo después con ayuda de otros ninjas. Note como entraban estudiantes y otros mas salían pero no había nada extraño, tal vez había sido avisado o me había visto sin moverme mucho en el edificio donde estaba – Soy un idiota debí esconderme mejor – Me decía en voz alta puesto que estaba a simple vista. Me iba a ir pero vi que alguien se acerco sacando un par de botes de pintura comenzando a realizar nuevos grafitis en las paredes cerca de la puerta principal, sin duda tenía valor para hacer aquello puesto que estaba eligiendo el lugar donde más personas podrían detenerlo, estaba observándolo quería ver que mas realizaba antes de intentar detenerlo puesto que si actuaba ahora podría escapar con mucha facilidad.

Note que alguien más se acercaba y el también lo noto por lo que actué rápido, no iba a dejar que esta vez escapara – Detente, así será más fácil todo – Le grite lanzándome para detenerlo pero los reportes eran ciertos el tenia una velocidad superior a la de muchos pero no por ello lo iba a dejar escapar, sin duda se debía de tratar a algún jutsu en sus pies para tener dicha velocidad. Pareció no importarle mi advertencia porque no se detenía. Una pequeña risa se dibujo en mi rostro puesto que pensaba que mi primera misión iba a ser más aburrida como pasear a algún perro o ayudar a algún anciano en su casa pero el atrapar a alguien me parecía interesante como primer trabajo – No lo compliques simplemente detente – Le gritaba, iba algo atrás pero aun no lo perdía de vista y eso era bueno, no quería utilizar tan pronto mi marioneta puesto que así como yo él tampoco sabía de mis habilidades y era mejor mantenerlas ocultas por un tiempo más, solamente las utilizaría si comenzaba a alejarse lo que podría ayudarme a reducir distancia o hacer que él se detuviera por un momento y alcanzarlo al fin.

Tal parecía que lo iba a perder por aquello saque a mi marioneta, la primera que había tenido y la lance para hacer que se detenga, en cuanto la vio y cambio de dirección. Poco a poco comencé a alcanzarlo y evitar que se alejara mas, ya éramos dos en este momento los que lo perseguíamos aunque uno dependía de mi concentración para que siguiera su camino. No se alejaba mucho del dojo, por lo que tenía que detenerlo pronto. Separe mi marioneta logrando detener al joven de los pies lo que evito que se pudiera seguir moviendo – Te lo dije, si te detenías seria más fácil - Le decía mientras me acerque a quitarle aquello que cubría su rostro. Mi sorpresa fue cuando vi que se trataba de una joven la que hacia todo aquello – No molestes, después de que cumpla mi castigo seguiré haciendo esto y esta vez no podrás detenerme – Me decía muy segura de sí misma, tal vez podría ser cierto o tal vez no pero no era algo que le iba a dejar – Eso lo veremos, ahora vamos a la oficina del kage para que tengas tu castigo – No la soltaba ni con mi marioneta ni yo mismo, puesto que no quería que escapara después de haber tenido algo de complicación en atraparla.